Turning tables

No dejaré que te acerques tanto como para herirme, no, no te preguntaré, para que solo me dejes. No te puedo dar lo que te piensas que me diste tú. Ya es hora de despedirse de esta forma de darle la vuelta a las cosas. Bajo la más dura apariencia puedo ver, que donde el amor se perdió se encontró tu fantasma. Capeé un millón de tormentas para dejarte, y da igual todo lo que lo intentes, jamás me derribarás.